jueves, 27 de julio de 2017

Yo soy una mujer. Tú eres gilipollas. (Por Kat Endgame)



Por Kat Endgame ( https://medium.com/@katendgame )

Una respuesta al ensayo de Olivia Broustra (@PolelifeandPussy)

“Yo soy una mujer. Tú eres una mujer trans. Y esa distinción importa.” ("I am a Woman. You are a Trans Woman. And That Distinction Matters.")

Traducido por Duna Haller.

Aviso de contenido: Transmisoginia, trauma, violación, suicidio, abuso, sexo, acoso sexual y bullying, cisexismo.

Prólogo: Chica dura

No leí el artículo en días, sólo conociendo su existencia porque mis redes sociales se llenaron de respuestas al texto - de amigues trans y de aliades furioses de ver otro artículo sensacionalista sobre mujeres trans. Un artículo de Medium de una autora de 24 años, Olivia Broustra, se extendió como un reguero de pólvora entre las feministas "críticas del género" y luego comenzó a circular en el amplio ecosistema feminista de Facebook.

Con cautela, me enzarcé en una serie de largas conversaciones con amigues de amigues en Facebook. A veces las conversaciones eran productivas, a veces no. La gente decía cosas terribles, algunas por inexperiencia al discutir los puntos más finos del discurso feminista trans-inclusivo y otras por malicia. Me sorprendió encontrar a alguien que conozco compartiéndolo totalmente en serio y después de que le señalé (calmadamente) que el artículo es (sangrantemente) transfóbico, ella me preguntó por qué.

Estaba un poco aturdida. Después de unas horas sin ningune aliade saltando para explicar por mí, decidí zambullirme en ello. Con el corazón lleno de temor, empecé a leer el artículo, y parecía como una especie colección de todos los argumentos anti-mujeres trans desde la publicación de “El Imperio Transexual” de Janice Raymond. Mi cerebro se enredó, tan pronto como amenazaba con escribir esto, en una espiral de vergüenza, miedo, auto-odio y duda - no porque yo secretamente crea que estas gilipollas dicen algo con sentido, sino porque me siento perseguida por los fantasmas de mis amigas muertas por suicidio. Y por demasiados años hemos estado teniendo conversaciones amigables con estas personas.

LA ÚNICA MUCHACHA ALTA EN LA FIESTA BOLLERA

Me identifico como cuir, definitivamente también me atraen los hombres, pero desde el momento en que vi a una mujer en ropa Carhartt y tirantes supe lo que era: una bollera. El mundo parece un lugar muy diferente de lo que era cuando empecé a tener esta conversación hace doce años. Cuando por fin me alejé de una vida de mentiras sonrientes y traté de vivir mi mejor vida gay, encontré una increíble y vibrante comunidad cuir para florecer. George Bush estaba en el cargo, mi estado acababa de aprobar una enmienda constitucional que prohibía el matrimonio gay, y la cultura Riot Grrrl / bollera era una isla en un mar de odio y miedo.

Incluso antes de convertirme en profesora de estudios de mujeres, estaba inmersa en el pensamiento feminista. Adoré a Ani Difranco y a Team Dresch. Leí “Unas bollos de cuidado” y “Hothead Paisan”. Estudié a Judith Butler y Audre Lord. Mi vida social giraba exclusivamente en torno a eventos de bolleras / lesbianas en mi ciudad, y en casi todos ellos yo era la única mujer trans en la habitación (todavía es una ocurrencia común).

Mi conexión con la cultura lesbiana me llevó a Michfest, y luego rápidamente a Camp Trans, ya que Michfest se había convertido en el punto cero de esta lucha ideológica entre la inclusión y la exclusión de las mujeres trans. Una lucha que, como muchos de los argumentos hechos en el artículo de Broustra, se escinde por el medio de mi cuerpo. Pasé cientos de horas en foros y en persona intentando solemnemente construir una cultura que pudiera ser inclusiva y solidaria para todas - e intentando evitar las llamaradas de ambos bandos. Intenté muy duramente ser la razonable, "auténtica" chica trans y fue una maldita pérdida de tiempo, porque no se puede razonar con personas que niegan tu humanidad.

Los argumentos que construyeron los mitos de la malvada mujer trans  depredadora sexual que vendrían a arruinar nuestra comunidad de mujeres y que "justifican" la exclusión de las mujeres trans de los espacios sociales y los servicios sociales críticos eran exactamente los mismos que Broustra está tratando de “demostrar” en su artículo de hoy.

Estimade lectore, ¡dejemos de lado algunos mitos!



Mito #1:

Las mujeres son silenciadas por los hombres. Las activistas trans han sido muy crueles conmigo y mis amigas en respuesta a nuestras ideas. Ergo, las mujeres trans son hombres.

Broustra cita numerosos ejemplos de mujeres trans que se comportan mal en Internet, y en algún nivel me compadezco. Les trolls* son un coñazo, y ser blanco de trolls es una experiencia aterradora. Dicho esto, la gran mayoría de las mujeres trans no son trolls, y serlo no te hace no ser una mujer, te hace una troll.


(Nota de la traductora: “troll” hace referencia a una persona que dedica su tiempo a insultar gratuitamente y acosar a otras personas por internet, y las hay en todos los géneros – obviamente)
¿Se ha detenido Broustra a considerar que tal vez la gente reacciona con tanta volatilidad porque sus posiciones y declaraciones son horriblemente ofensivas)

Mito #2:

A algunas supervivientes de violación se les activa un desencadenante traumático al ver un pene. Mujer Trans = Pene, por lo tanto las mujeres trans no deben ser permitidas en los espacios de mujeres.

Tratar de acomodar las necesidades de les supervivientes de abuso es una tarea extremadamente importante. He organizado un montón de eventos, y estos asuntos aparecen a menudo. Si alguien (o las personas de apoyo de alguien) se acercara a mí y dijera: "Mi abusadora, que ambas conocemos, podría estar aquí. Si ella viene, ¿puedes no dejarla entrar?", haría todo lo que estuviera en mi mano para asegurarme de que esta superviviente no tuviera que entrar en contacto con su abusadora. Esto podría hacerse de muchas maneras diferentes, pero las estrategias de apoyo de supervivientes no son el centro de este texto.

Si alguien se acercara a mí y me dijera: "Me activa el trauma la presencia de gente de ojos marrones, ¿puedes garantizarme que nadie con ojos marrones estará aquí?" le diría que se fuera a la mierda. Atender a las necesidades de una superviviente individual, especialmente una superviviente hipotética, no es una buena base para posiciones políticas generales. Tienes que personalizar tu respuesta en función del contexto y la comunidad con la que trabajas.

Además, y esto debe ser obvio, ¡no todas las mujeres trans tienen pene! Denegar el acceso de las mujeres trans a los espacios de mujeres (ejemplo de la vida real: centros de apoyo a supervivientes de violencia doméstica) sobre la base de la posibilidad de que una superviviente sufra un desencadenamiento del trauma por la visión de un pene hipotético muestra una comprensión muy pobre no sólo de cómo la mayoría de las mujeres trans se relacionan con sus cuerpos en el espacio público, sino también la miríada de formas que tienen los cuerpos de las mujeres trans. Puedo, y lo he hecho, correr por los espacios de bolleras con el culo desnudo porque yo he sido lo bastante afortunada (léase: chupé una gigantesca cantidad de penes por dinero) para hacerme una cirugía muy temprano. Una cirugía por la que pagué como 14.000 dólares de mi propio bolsillo, porque hace diez años este país era AÚN PEOR. #dejaddetocármelos #hashtaginapropiado

Mito #3:

Las mujeres trans han sido “socializadas hombre”, las mujeres cis han sido “socializadas mujer” - estas son experiencias significativamente distintas.

*Bosteza*

Estoy tan harta de esta conversación.

Las mujeres tienen todo tipo de pasados y crianzas diferentes - algunas más o menos empoderadas y más o menos traumáticas que otras. Pregúntale a cualquiera sea discapacitada, que no sea blanca, que sea migrante o hija de migrantes, que sea clase obrera, etc. Audre Lorde dijo: "No son nuestras diferencias las que nos dividen. Es nuestra incapacidad para reconocer, aceptar y celebrar esas diferencias." Creo que ella usó un argumento firme. Quiero que celebremos nuestras diferencias y construyamos movimientos feministas más robustos y firmes con las necesidades de todas las mujeres (y gente no conforme con el género), trabajando en nuestra liberación conjuntamente.

El feminismo no es un movimiento concreto, son muchos los feminismos que existen codo con codo, absorbiéndose y fragmentándose. Esta no es la primera vez que un grupo de mujeres ha sido excluido de ser "Mujer De Verdad Apropiada™”, basándose en diferencias fisiológicas y/o culturales.

Al final, obviamente, como si estuviera jugando al bingo transfóbico, ella pone de ejemplo a Caitlyn Jenner. ¡Caitlyn Jenner! ¡Ojalá pudiera no oír ese nombre otra vez! Venga, muéstrame tu evidencia anecdótica de que unas pocas famosas y ricas mujeres trans "se benefician de sus privilegios masculinos" y yo te respondería mostrándole la legión de niñas y mujeres muertas que se suicidaron o fueron asesinadas antes de tener la oportunidad de "beneficiarse del privilegio masculino”,  pero no puedo, porque tu cultura las mató. Elige una mejor mascota para tu estúpida guerra cultural.

"El privilegio masculino", como todas las formas de privilegio estructural, no es algo singular, es un mapa de muchos privilegios más pequeños que se arremolinan entre un montón de puertas de “beneficio/prejuicio”. Es difícil definir dónde se delimitan el privilegio del hombre y el privilegio de la masculinidad. El concepto es útil discutiendo a los hombres cis y su privilegio relativo a las mujeres cis, pero comienza a romperse cuando se habla de personas trans. Ningune de nosotres es un detallado resguardo de toda nuestra historia de privilegios y trauma, y ​​el privilegio no es un interruptor off / on que se establece al nacer.

Este argumento también se basa en el supuesto de que les niñes trans y cis experimentan la socialización de manera idéntica. Puedo prometeros que cuando yo era una niña de 5 años cantando canciones de la Sirenita, deseando poder ser como Ariel pero también llena de una oscura nube de temor y auto-odio al saber que estaba llena del mal satánico, yo interiorizaba mensajes sobre el género de manera diferente. Fui socializada como mujer como cualquier otra mujer por lo que yo interiorizaba, sobre lo que construí mi sentido de mí misma, no por mi lista particular de sufrimientos.

Pero realmente no tengo que explicar esto a ninguna de vosotras. Era mi niñez, no importa cuán cargada de matices, no importa que sea invisible para vuestros ojos. Son las veces que intenté suicidarme sin estar del todo convencida porque una parte pequeñísima de mí sabía que podría haber una pizca de esperanza. Es el horror y el trauma que sobreviví porque soy fuerte. Esta niñez es mía para reclamar y deconstruir, no vuestra.

Nunca vuestra.

Mito #4:

El "techo de algodón" va sobre violaciones, y definitivamente no va sobre que odiemos a las mujeres trans

El concepto de "techo de algodón" ganó un montón de tracción entre las feministas transfóbicas como un clamor lloroso de "¿ves? ¡Las horribles mujeres trans quieren violar a las lesbianas! ",lo cual sería horrible si fuera cierto.

La refutación de este concepto absurdo se reduce a esto:

-        El deseo es político.

-        Nuestros sesgos influyen en nuestro deseo.

-        Nuestras elecciones, basadas en el deseo, pueden sostener la opresión y el privilegio estructural.

Mirad el trabajo que se está haciendo desde la positividad del cuerpo y la aceptación de la gordura. Si “no gordes y no femenines" es inaceptable, también lo es "no transexuales". El argumento no es que DEBES ACOSTARTE CON MUJERES TRANS O ENTONCES ERES DEMONÍACA - sólo que si tu posición es que te sientes atraída por "mujeres", y tu concepto de "mujeres" no incluye a las mujeres trans, tu posición es tránsfoba y quizás deberías revisar tu deseo un poco. El deseo es político, y apuesto a que hay algunas mujeres súper sexis con las que podías estar saliendo si fueras menos intolerante. Algunas de ellas incluso podrían ser trans.

También ve al mito #2 anterior para ver por qué asumir la forma de los genitales de la gente es basura.

Mito #5:

Las mujeres trans me oprimen criticando mi discurso

¡Entonces considérate oprimida, cabrita! (Lo siento... no pude evitarlo).

Broustra argumenta esencialmente que debido a que los derechos de las mujeres están amenazados, y porque las lesbianas están oprimidas, las mujeres trans deben dejar de oprimir a las mujeres reales con su búsqueda tonta de justicia y respeto.

Déjame ser jodidamente clara contigo, queride lectore.

Soy una mujer. Me acosan si no me visto como una monja. Siento que la mirada masculina me sigue. Estoy profundamente horrorizada por el depredador sexual que fue elegido para la jodida presidencia. A mí también me pagan menos que a los hombres y constantemente hablan por encima de mí en mi profesión. Como básicamente todas las mujeres, yo también experimento ser avergonzada por mi cuerpo. Yo también soy una superviviente de abusos sexuales. Soy una ex trabajadora sexual. Yo también me siento en conflicto con el uso de maquillaje, con el aumento / la pérdida de peso y cada uno de los otros problemas de mierda por el que está preocupada aquí nuestra joven amiga. Es una mierda, chica, lo siento. Siento que en los últimos doce años de lucha no hubiéramos podido hacer el mundo mejor de lo que lo hicimos. Podríamos ser mucho más peligrosas luchando juntas si pudieras pausar tus prejuicios el tiempo suficiente para ver que estamos en el mismo maldito lado.

En otras, mejores palabras, Son of Baldwin escribió en Twitter:

“Podemos estar en desacuerdo y seguir amándonos a menos que tu desacuerdo esté basado en mi opresión y la negación de mi humanidad y derecho a existir.”
Podrías decirme que no soy una mujer, pero este mundo me lo recuerda cada maldito día.

Mito #6.

Es suficiente apoyar de boquita a los pronombres “preferentes” y la atención médica de las personas trans mientras discutimos contra sus identidades y pertenencia social en nuestro espacio generizado.
No, no es suficiente. ¡Sacad la palabra "aliada" de vuestra boca!
La transfobia, la homofobia y la misoginia están entrelazadas en un terrible cóctel de maldad. Cuando un niño es golpeado por ponerse pintalabios, ¿es porque piensan que es un maricón y que pueden golpearle impunemente? ¿Es porque piensan que podría ser una asquerosa transexual? ¿O es sólo que está actuando como una mujer y lo peor a lo que un chico podría parecerse es a una mujer? Podríais articular cada una de esas opciones, pero todas ellas están conectadas por la denigración de la feminidad y la violencia del patriarcado. Cuando nos resistimos a esta, debemos resistir en todos los ejes de opresión en solidaridad unes con otres.
Resistencia significa trabajo, trabajo para ser responsable de nuestros privilegios. Trabajar para empoderarse mutuamente. Trabajar para desmantelar las estructuras del Patriarcado Capitalista Supremacista Blanco. Realmente no me importa si dices bien mi pronombre porque sé que me llamarás “él” por puro despecho de todas maneras. Me importa que dejes de golpear hacia abajo y empieces a trabajarte tu mierda para que más de mis amigas puedan seguir viviendo y podemos llegar a trabajar en destrozar todo este sistema.

Mi libertad de existir sin miedo es en última instancia tu libertad de existir sin miedo.

Epílogo: La muchacha agotada está agotada

Broustra escribe:

    
"Si el movimiento de las mujeres transgénero quiere que todas las mujeres estén de su lado, la manera de obtener nuestro apoyo es no ignorarnos cuando clamamos por las diferencias y expresamos nuestras necesidades como mujeres nacidas mujeres, eso nos dificulta más oíros."
Cariño, no te estoy ignorando. He estado escuchando a mujeres como tú explicarme por qué soy un monstruo literalmente la mitad del tiempo que has estado viva. Tú no estás expresando las necesidades de las mujeres oprimidas - el movimiento de mujeres ya ha avanzado sin vosotras. No hay "movimiento de las mujeres transgénero".

A menos que cuentes nuestros grupos secretos de Facebook donde tratamos de convencernos mutuamente de no suicidarnos.

En la pequeña medida en que alguien se preocupa aunque sea un poco por nuestras necesidades, es bajo la forma de instituciones liberales que implementan una premisa básica de: "Las mujeres trans son mujeres y no deben ser excluidas de los espacios de mujeres basado en que sean trans." Hay mucho más trabajo que hacer para apoyar la vida de las mujeres trans y su capacidad de acceder a los servicios vitales - y mientras gritas que “nuestros” derechos como mujeres están bajo ataque (a estas alturas de la película de manera totalmente hipotética), las legislaturas de todo el país están tratando de convertir en ilegal que yo mee en la misma habitación que tú.
Broustra continúa:

    
"El movimiento de mujeres transgénero no puede ser otro movimiento que oprime a las mujeres, pero eso es (sic) en lo que (sic) se está convirtiendo aparentemente."
Vamos a ver, les debes a las mujeres trans de color iniciar ese movimiento que te ha dado el derecho a casarte. Las amenazas del supuesto "movimiento de las mujeres transgénero" han existido desde hace mucho tiempo, en todas nosotras las que nos negamos a morirnos, y si alguna vez oprimen a las mujeres, es porque nos estamos oprimiendo a nosotras mismas.
Somos mujeres.

¿Tú? Tú eres gilipollas.

El(los) movimiento(s) Feminista(s) seguirán aquí esperándoos a vosotras con los brazos abiertos, cuando sea que decidáis dejar de odiar y atacar a las mujeres trans con burla y marginalización. Tenemos trabajo real que hacer.



Crédito de la imagen:

"Lobo en piel de oveja" por Mr. Blue MauMau, licenciado bajo CC BY 2.0